La naturaleza adictiva del tabaco dificulta abandonar este hábito y sus componentes tóxicos
deterioran gradualmente el funcionamiento de todo el organismo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que existen 1.300 millones de
consumidores de tabaco alrededor de todo el mundo. Se calcula que solo en América, cada año,
mueren alrededor de 8 millones de personas. De ellas, 7 millones son fumadores activos y más de 1
millón estuvieron expuestos pasivamente al tabaco (no fumadores)
El Dr. Cristián Ibarra, broncopulmonar e integrante del Centro de Enfermedades Respiratorias de
Clínica Universidad de los Andes, explica que “el tabaco es el único producto de consumo legal que no
solo daña a la persona que lo fuma, sino también, a todos quienes están expuestos al humo que este
emana. Actualmente, Chile es el país que presenta la mayor prevalencia de consumo de tabaco en
América Latina, tanto en jóvenes como en adultos”.
Se estima que, en nuestro país, 1 de cada 5 fumadores consume más de 10 cigarros al día y se calcula
que el consumo entre 10 o 20 cigarrillos diarios aumenta el riesgo de muerte 14 veces. Asimismo, se
declara que el tabaco es responsable del 30% de las muertes por cáncer a nivel nacional,
principalmente, de pulmón, tráquea, boca, esófago, laringe, estómago, riñones.
Por esta razón, el Dr. Ibarra entrega algunos consejos que podrían ayudar a conseguir dejar de lado su
consumo:
Asesorarse por un programa médico para dejar de fumar
Fijar una fecha para dejarlo
Redactar una lista de motivos para abandonar su consumo
Enumerar los cigarros que se fuma al día
Deshacerse de cajetillas, encendedores y ceniceros
Practicar pequeños ensayos de abstinencia o técnicas de relajación
Buscar aliados entre familiares y amigos, además de informarle al círculo cercano que se
quiere dejar de fumar
Hay que recordar que los síntomas de ansiedad, irritabilidad, trastornos del sueño, falta de
concentración o aumento del apetito pueden parecer muy intensos, pero siempre terminarán
siendo pasajeros
Evitar las situaciones que solían traer el consumo de un cigarro
Incluir a la práctica diaria un mayor consumo de agua, mantener una buena alimentación y
practicar ejercicio
“Dejar de fumar es un proceso difícil que puede tomar bastante tiempo, no obstante, mantenerse
alejado del tabaco es la parte que toma más tiempo y la más importante del proceso. Cada día se debe
tomar la decisión de no fumar y lo principal es ser consciente de cuáles serán los beneficios de dejar el
consumo del cigarro”.
Los efectos benéficos para la salud:
A los 20 minutos, disminuye el ritmo cardiaco y baja la tensión arterial
Dentro de las 12 horas siguientes, el nivel de monóxido de carbono en sangre disminuye hasta
valores normales
Después de 2-12 semanas, mejora la circulación sanguínea y aumenta la función pulmonar
En 1-9 meses, disminuye la tos y la dificultad para respirar
En 1 año, el riesgo de cardiopatía coronaria es un 50% inferior al de un fumador
En 5 años, el riesgo de accidente cerebrovascular corresponde al de un no fumador entre 5 y
15 años después de dejar de fumar
En 10 años, el riesgo de cáncer de pulmón disminuye hasta ser el 50% del de un fumador, y
disminuye también el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago, vejiga y páncreas.
En 15 años, el riesgo de cardiopatía coronaria es el de un no fumador
En el caso de no tener resultados positivos, siempre se puede contar con un equipo de especialistas
que pueda dar apoyo en el proceso.