Por Leonardo Araneda Salazar estudiante Administración de Empresas AIEP Osorno .
Colonia Dignidad
Rodado en Buenos Aires, Luxemburgo, Múnich y Berlín, el último film del director de «John Rabe» comienza con las imágenes de la victoria de Salvador Allende en Chile de 1973. Poco después la cinta introduce a los personajes centrales, Daniel (Brühl), un diseñador alemán radicado hace poco en Chile, «enamorado» del país y de su proceso político, y su novia Lena (Watson), una azafata de Lufthansa que aprovecha sus escalas para visitar a su amante. Daniel asiste a mítines políticos y diseña los carteles y los panfletos en favor de Allende: motivo suficiente para que, cuando Pinochet llega al poder, sea trasladado al Estadio Nacional de Santiago, desde donde, y tras sufrir horribles torturas, es deportado a Colonia Dignidad. Desesperada, Lena ingresa voluntariamente a la secta para encontrar a Daniel, sin imaginar los horrores que se suceden tras los cercos electrificados de la comunidad de inmigrantes alemanes en la que Schäfer maneja los destinos de hombres, mujeres y niños como si fuera su dios.
La película de Gallenberger va incluso más allá y acusa de complicidad a la embajada alemana en Chile en tiempos de Pinochet. «Chile está más avanzado que Alemania en analizar este tema», apuntó el director, que dijo que los archivos sobre Colonia Dignidad en Alemania siguen siendo clasificados.
Una película bastante fría en cuanto a sentimientos por la relación que tiene que esta pareja y que se forzosamente separada. La cinta además cuenta y muestra las torturas vividas al interior de Colonia Dignidad y cuanto “Lena” lucha para poder liberarlo de los crueles maltratos a los que era sometido. Además cuenta con una gran adaptación de los personajes, excepto por el papel de Paul Schafer quien interpreta a quien es el que decide el destino de todos los secuestrados y torturados ahí que pareciera adaptarse más bien a un papel de villano de una película de héroes que a uno donde como sabemos es un tirano, despiadado que no le importa la vida de los demás.
Nota: 5.5