El proyecto financiado a través del Fondo de Protección Ambiental (FPA) se enmarca en el programa Quiero Mi Barrio del Minvu que se ejecuta en el sector.
Con la alegría de la misión cumplida, los vecinos y vecinas celebraron la culminación del proyecto denominado “Erradicación de microbasural y mejoramiento de Plaza Orlando Muñoz”, obra ejecutada en la población Irene Daiber, y que se enmarcó en el programa de recuperación de barrios “Quiero Mi Barrio” del Minvu.
Este proyecto fue financiado a través del Fondo de Protección Ambiental (FPA) del Ministerio de Medio Ambiente, y permitió rescatar y valorar los elementos del medioambiente natural y construido contenidos en el polígono del área verde Plaza Orlando Muñoz.
Al respecto, la presidenta del Consejo Vecinal de Desarrollo, Zoila Aravena, explicó que la idea de proyecto era abordar la problemática ambiental sentida por la comunidad del barrio y restaurar el lugar que era un foco de microbasural.
Así, el proyecto contemplo el mejoramiento y reposición de mobiliario urbano existente previo diagnóstico participativo. Además, la construcción de pavimentos para conseguir un desplazamiento seguro, conectando las áreas existentes.
Junto a ello se desarrolló una huerta urbana contigua al área de juegos infantiles, la cual es símbolo de la erradicación del microbasural. El espacio diseñado con la comunidad incluyó la instalación de un letrero con información sobre las especies nativas que se pueden encontrar en la plaza.
Finalmente, cuenta con un arboreto, donde se realizará reforestación con especies nativas, las cuales serán propuestas a la comunidad por el equipo técnico previa caracterización e información de disponibilidad. Las especies propuestas deben tratar de ser las más idóneas según el contexto local y propenderán a contribuir a la sostenibilidad ambiental del barrio como elementos de diseño del paisaje urbano.
El seremi de Vivienda y Urbanismo, Daniel Barrientos explicó que “el objetivo de la intervención era promover e implementar acciones de cuidado en el espacio público y potenciar el rol del árbol nativo como elemento de diseño del paisaje, en un sector con presencia de microbasurales y que implicaba un deterioro para el medioambiente. El proyecto ejecutado, tiene un impacto relevante en la vida cotidiana de la comunidad, mejorando su hábitat y calidad de vida”.
