Multas de hasta $160 mil y suspensión de licencia son algunos de los castigos. Penas menores, considerando que una breve distracción puede provocar un accidente fatal.
Se acabaron las excusas. El 16 de marzo fue publicado en el Diario Oficial el reglamento de la Ley No Chat -promulgada en octubre pasado- que castiga a quienes chatean, miran su teléfono o manipulan un dispositivo móvil mientras conducen. El propósito: mejorar la seguridad vial y disminuir el número de muertes por accidentes totalmente prevenibles.
Según datos de la Conaset, en 2011 la cifra de fallecidos por la “conducción no atenta a los condiciones de tránsito del momento” llegó a 82, mientras que en 2020 el índice se disparó a 186 decesos. Los lesionados, en tanto, subieron de 9 mil a más de 12 mil en igual periodo.
La ley “va en la dirección correcta”, explica Carolina Calderón, académica de la Facultad de Ingeniería y Tecnología de la U. San Sebastián, y experta en seguridad vial. “Está largamente documentado que el uso del celular distrae la conducción del vehículo, tanto por el hecho de desviar la vista unos segundos, como por el hecho de desconcentrar al chofer”, apunta.
Estudios de la Organización Mundial de la Salud advierten que la manipulación de un teléfono al manejar es similar a conducir en estado de ebriedad, recreando conductas parecidas, como disminuir los reflejos al volante. Chatear al conducir es similar a manejar tras haber bebido 4 cervezas. Además, el tiempo promedio que la vista se desvía al chatear es de 5 segundos. De este modo, si un auto viaja a 50 km/h, equivale a que el conductor recorre 70 metros “a ciegas”.
“Estas ‘distracciones cognitivas’ aumentan el tiempo de reacción del chofer, especialmente el de frenada, influyen en su reacción frente a señales del tránsito, entorpecen su capacidad para mantenerse en la pista adecuada y reducen su percepción de la situación que está viviendo”, agrega la académica.
“Existen estudios que corroboran que el uso del celular aumenta hasta en 4 veces las probabilidades de accidentes, riesgo que es similar usando o no manos libres, por lo que en un futuro también debería estudiarse su eliminación”, apunta Calderón. Simplemente, “no se debería hablar por teléfono mientras se maneja”.
Ni en semáforos ni tacos
La Ley No Chat es categórica: no se puede utilizar el celular u otro dispositivo que no venga incorporado de fábrica en el vehículo, si su motor no está completamente apagado. De este modo, si se está en una luz roja, o detenido en un taco, la manipulación del teléfono sigue prohibida. En concreto, quien va al volante no puede:
Hablar por teléfono sin sistema de manos libres.
Manipular la pantalla del celular, aun cuando esté en un porta-celular.
Llevar el teléfono en la mano.
Enviar mensajes de texto o mensajes de audio.
Tomar fotografías o grabar videos mientras conduce.
Las medidas aplican a todo tipo de conductores, ya sea de vehículos motorizados, como ciclos.
El costo de chatear
Desde ahora, la ley califica como “infracción gravísima” el cometer las conductas mencionadas, aplicando multas de entre 1,5 a 3 UTM ($80.000 – $160.000 app) a quienes sean sorprendidos. A ello se suma la suspensión de la licencia de conducir entre 5 a 45 días, días que pueden llegar a 90 días en caso de reincidencia.