Sólo el año 2015 la PDI recibió a nivel nacional 8.615 decretos para investigar presuntas desgracias. De éstos, 3.568 corresponden a denuncias por niños y adolescentes extraviados cuyas edades fluctúan entre 9 y 17 años, cifra alarmante considerando que la gran mayoría de éstos fueron abandonos de hogar voluntarios debido a diversas problemáticas personales o familiares.
En la región de Los Ríos en tanto, esta cifra alcanzó durante el año recién pasado los 106 casos, registrándose el peak de decretos diligenciados por la PDI en el mes de marzo y abril, datos recopilados por la policía y que buscan visibilizar esta realidad poco conocida y entregar herramientas a padres y adolescentes para prevenir la ocurrencia de estos hechos.
En este sentido, la experiencia de la PDI en la investigación de estos casos, permite identificar ciertos patrones que se repiten: la mayoría de los jóvenes se sienten incomprendidos por su núcleo familiar, tienen carencias emocionales y grandes problemas de comunicación con sus padres por lo que deciden huir. Otros factores de riesgo incluyen el fracaso y frustración escolar, problemas sentimentales, violencia intrafamiliar o rebeldía de los niños o jóvenes.
Por ello, el llamado ante esta problemática es claro. Los padres deben estar atentos y generar una buena comunicación con sus hijos, preocupándose mucho más allá de sus necesidades materiales. Comprender que la adolescencia es una etapa crítica, en que el/la joven está definiendo su personalidad e identidad, por ello son los padres y personas adultas las responsables de entregarles una adecuada formación.
Algunos tips para generar un clima favorable para la comunicación efectiva son los siguientes:
- No delegue en un menor de edad la responsabilidad de su propio cuidado y educación, o de la de otros menores.
- Establezca los límites en forma clara y sin contradicciones en lo que se instruye.
- Mantenga un adecuado control sobre sus actividades y contactos. Es recomendable saber sobre sus amigos y sus familias, conociendo nombres completos, números de teléfonos y direcciones.
- Respecto a las redes sociales, verifique regularmente sus contactos y supervise sus conversaciones. Dedique tiempo para explicar a sus hijos por qué es necesario esta supervisión y los riesgos que se quiere evitar.
- Solicite orientación: La PDI realiza charlas a colegios e instituciones, que ayudan a los padres y a estudiantes a conocer distintas situaciones de riesgo a que están expuestos y cómo evitarlos. Consulte en el cuartel de la PDI más cercano.