En la reciente sesión de la Comisión de Obras Públicas del Senado, el senador por Los Ríos, Iván Flores, destacó los graves problemas que enfrentan los Servicios Sanitarios Rurales (SSR) en nuestro país, especialmente en la capital regional.
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En primer lugar, Flores cuestionó la disponibilidad y calidad del agua en los acuíferos. En ese contexto, manifestó: “Recuerdo bien las palabras del ministro Moreno, quien decía que de los 272 acuíferos en Chile, sólo se conocía la realidad de nueve. Se encargó entonces revisar cuál era el estado del arte de al menos 100 de los acuíferos más críticos. No sé si se habrá terminado el estudio”.
En cuanto a la administración y recursos de los SSR, Flores señaló que estas organizaciones, que ya operan con dificultad, ahora deben enfrentar la falta de apoyo técnico después de que se terminó el convenio entre las sanitarias y la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH). En ese contexto, Flores comentó: “Los SSR a duras penas administran el agua que a veces les escasea porque no tienen recursos para contratar personas expertas”. Además, expuso la grave situación derivada del término del convenio con la DOH: “Eran casi trescientos profesionales contratados por distintas sanitarias para dar asistencia técnica de mantención, reparación, sugerencias y modificación de tecnología a los SSR. Hoy día, entiendo que la DOH tiene solamente alrededor de 100 profesionales”.
Asimismo, en la región de Los Ríos hay solo un electromecánico para atender todas las fallas. Sobre esto, el senador Flores destacó la falta de normativas claras para las plantas de tratamiento rural, manifestando: “Hemos venido planteando al Ministerio de Salud hace más de un año que no existe norma chilena respecto de las plantas de tratamiento rural. Por lo tanto, cuando un alcalde decide construir un villorrio, el Ministerio de Vivienda le propone la plata, y la calidad de la planta de tratamiento del sistema sanitario elegido depende de la voluntad del director de obra de turno”.
La ausencia de una norma clara implica que la calidad de las plantas de tratamiento de aguas dependa del criterio del director de obras de turno, lo cual resulta en soluciones ineficientes y fallidas en la mayoría de los casos. Ni el gobierno regional ni ninguna institución pública pueden administrar estos proyectos de manera adecuada sin una normativa específica.
Finalmente, en cuanto a la Ley de Servicios Sanitarios Rurales, que ya se ha postergado varias veces, el senador Flores manifestó: “Es imposible exigir a los SSR que se transformen en servicios sanitarios rurales con obligaciones de agua y alcantarillado cuando apenas pueden manejar el agua y no contamos con una norma chilena adecuada para el alcantarillado. Estamos en un limbo legislativo y necesitamos enfrentar este problema con urgencia”.
En este contexto, el senador Flores hizo un llamado a la ministra de Obras Públicas y al Ministerio de Salud para que trabajen conjuntamente y proporcionen las soluciones necesarias.
