Con la llegada del verano y de las vacaciones aumenta la presencia de turistas en las diferentes playas de la región, y, por lo tanto, también aumentan los avistamientos de fauna marina como pingüinos y lobos comunes, los que se encuentran en su hábitat natural y en la mayoría de los casos solo se encuentran descansando y tomando sol.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura ha recibido varias alertas por la presencia de ejemplares de fauna marina, donde han podido confirmar que estos animales no se encuentran en peligro ni están heridos. Si bien los reportes dan cuenta de la preocupación de la ciudadanía, el director regional de Sernapesca Los Lagos, Cristian Hudson, hizo un llamado a la tranquilidad: “Si bien son animales marinos, los roqueríos y playas también son parte de su entorno, por lo que es absolutamente normal que salgan del agua a descansar, a tomar sol o alimentarse. Como Sernapesca nuevamente hacemos el llamado a observar la fauna marina desde una distancia prudente, y bajo ninguna circunstancia alimentar, tocar o manipular a estas especies”, comentó.
En la temporada estival es normal que se puedan observar crías de pingüinos y lobos marinos de distintas edades en las playas de la región. En este sentido, es importante que las personas eviten llevar mascotas al borde costero, y si lo hacen debe ser responsablemente y mantenerlas con arnés, correa y bajo vigilancia para que no perturben ni ataquen a la fauna silvestre.
Por su parte, Javier Cabello, especialista en fauna silvestre, comentó que: “estamos en temporada de pingüinos, ya que se suelen ver mucho más desde diciembre a marzo que en otras épocas. También es la temporada donde hacen más ingresos a los Centros de Rehabilitación en la región debido a que los juveniles, quizás más inexpertos, se ven enmallados en redes de pesca o desorientados. Muchos salen a la playa heridos o enfermos, sin embargo, hay otros que salen solo a descansar y no necesariamente tienen algún problema”.
El experto además recomienda que, si un animal sale a la playa, hay que observar al ejemplar y solo en caso de tener heridas visibles, cojeras, escasos movimientos o hay presencia de perros, entonces se debe recurrir a Sernapesca. Para el resto de las aves marinas costeras, se debe dar aviso al SAG.
En caso de que un ejemplar esté en peligro evidente, pueden dar aviso al teléfono 800 320 032 de Sernapesca, dando cuenta de su ubicación para que profesionales puedan ir a evaluar su condición.