La nave cumple una importante función en la definición de cuotas pesqueras de los de los principales recursos hidrobiológicos de nuestro país: jurel y merluza austral
El Subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico, junto al Director Ejecutivo del Instituto de Fomento Pesquero, Leonardo Núnez, realizaron una visita al barco de investigación Cabo de Hornos en el marco del próximo crucero de investigación para evaluación de las condiciones reproductivas de la merluza del sur.
Durante su visita el subsecretario Súnico destacó la importancia que el gobierno le ha dado a la investigación pesquera y acuícola: “Nosotros estamos dándole el vamos a un proceso de investigación científica respecto del stock de la merluza austral, merluza de tres aletas y merluza de cola que se desarrolla en la zona sur austral del país, con el objeto de disponer de la mejor investigación científica para tomas las decisiones de administración pesquera, entre ellas la asignación de cuotas tanto a la flota artesanal como a la industrial”.
El Director Ejecutivo del Instituto de Fomento Pesquero, Leonardo Núnez, explicó que el estudio se hace en la época de mayor agregación de los recursos mencionados para poder determinar el nivel de stock de la masa desovante de las hembras que están en proceso reproductivo de modo de tener la información que permita retroalimentar los modelos y definir escenarios de captura sustentables para las pesquerías”.
Este año el Gobierno está invirtiendo $21.746 millones en este ámbito, lo que es un 12% superior que el año 2014 y un 39% superior que el monto considerado en el último año de la administración anterior, en 2013. Además, el mensaje de la presienta del 21 de mayo de 2015, contempló la decisión de construir un barco de investigación de características costeras para apoyar el estudio de aguas interiores de la zona sur austral y de la relacionada a recursos pelágicos, el que estaría operativo agosto del 2017.
Cabe recordar que el Cabo de Hornos es una nave de investigación de última generación, cuya construcción se ordenó durante el primer periodo de la Presidenta Michelle Bachelet: es un barco silencioso que cumple con la norma acústica ICES 209, lo que permite que el barco pase a 20 metros sobre cardúmenes de peces sin que estos lo perciban. Además, cuenta con una quilla retráctil donde se encuentran instalados los sensores de pesca que se combinan con aquellos para realizar hidrografía y estudiar hidratos de gas, lo que evita que se forme la capa de burbujas que se pega al casco, haciendo que la medición sea más exacta. Además, posee capacidad para transportar a 25 científicos a bordo.
Desde su entrada en operaciones el Buque ha efectuado diversa investigación en el campo de las pesquerías, oceanografía y prestado servicios en mantención e instalación de boyas de monitoreo.
En el ámbito pesquero da cobertura a las demandas de investigación del recurso jurel y de las merluzas de la zona sur austral, ambas pesquerías consideradas estratégicas, la primera de ellas por la alta participación chilena en el marco de la Organización del pacifico Sur (ORP) y la segunda por la importancia socioeconómica para la zona sur austral de Chile.
Para el presente año el Buque se encuentra ejecutando un Programa de Investigación que cubre 229 días de operación.
El estudio
El crucero de investigación que se inicia el 31 de julio culminando el 3 de septiembre es parte del estudio encargado por el Ministerio de Economía y Subpesca a IFOP “Evaluación del stock desovante de merluza del sur, merluza de cola y merluza de tres aletas en aguas exteriores entre la X y XII regiones”. Esta información alimentará los informes técnicos que el IFOP pondrá a disposición de los Comités Científico Técnicos que se reunirán entre octubre y noviembre del presente año para definir la cuota biológicamente aceptable para el año 2016.
Cabe señalar que éstos recursos hidrobiológicos mantienen una actividad de alto impacto socioeconómico en las regiones X, XI y XII, cuyo desempeño afecta a un total aproximadamente de 7.000 puestos de trabajo directos de la industria y pesca artesanal, en una actividad económica que generó el año 2014 US$84 millones.
El proyecto de construcción del buque oceanográfico tuvo un costo de $ 67,5 millones de dólares, que fueron aportados por el Ministerio de Defensa, con $51 millones de dólares y la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, con $16,5 millones de dólares.
La Administración del Buque está bajo el alero de la Armada de Chile, resolviéndose su utilización en el Comité Directivo que se reúne periódicamente para resolver la investigación a ser ejecutada por el Buque. Este Comité Directivo está conformado por: Armada de Chile, Comité Oceanográfico Nacional (CONA), Comisió